Con la llegada del verano, diversos aspectos de nuestra rutina experimentan cambios: la vestimenta, la alimentación y hasta nuestras actividades al aire libre. No obstante, en esta temporada a menudo pasamos por alto un componente crucial de nuestra salud: la salud pélvica. El incremento de las infecciones urinarias durante los meses más cálidos se atribuye en gran medida a factores vinculados con la actividad y el clima.

El calor, en primer lugar, intensifica la sudoración y la humedad en la zona genital, propiciando un ambiente propicio para el desarrollo bacteriano. Además, muchas personas permanecen largos periodos de tiempo con trajes de baño húmedos, lo que contribuye a la proliferación de bacterias en el área pélvica.

Síntomas

La cistitis afecta a personas de todas las edades y géneros, pero su incidencia es más alta en mujeres. Sus síntomas se manifiestan de manera similar en ambos sexos siendo los más frecuentes:

• Sensación de ardor y dolor al orinar: provocado por la inflamación de la vejiga debido a la infección bacteriana.
• Urgencia urinaria: necesidad apremiante de orinar con frecuencia, aunque la cantidad de orina expulsada sea reducida.
• Cambios en la apariencia de la orina: puede tornarse turbia y, en ocasiones, adquirir un tono rosado debido a la presencia de sangre.
• Molestias en el área pélvica: incomodidad o dolores en la parte baja del abdomen o la pelvis.

Reconocerlos es crucial para garantizar un tratamiento temprano y eficaz que en general se basa en la administración de antibióticos para eliminar la infección bacteriana. Es esencial completar el tratamiento en su totalidad, incluso si los síntomas mejoran antes de su conclusión. Además, se aconseja incrementar el consumo de agua y tomar zumo de arándanos rojos o papaya, lo que contribuirá a acabar con bacterias y al mantenimiento de la higiene de la vejiga.

Prevención

La prevención juega un papel fundamental, por ello, seguidamente, comentamos algunas medias para evitar su aparición:

• Higiene adecuada: Se recomienda lavar la zona genital de adelante hacia atrás, con el propósito de evitar la transferencia de gérmenes del área anal a la uretra. No obstante, es aconsejable evitar un lavado excesivo en dicha área y evitar el uso de jabones irritantes.
• Cambios frecuentes de bañador: Durante la estancia en playas o piscinas, es aconsejable cambiar de bañador con regularidad ya que la humedad favorece la proliferación de bacterias, como la Escherichia coli, que es la causa más común de cistitis.
• Micción regular: Según la Asociación Española de Urología, es recomendable orinar cada cuatro horas, incluso si no se siente una urgencia, para evitar la retención de orina, excepto durante las horas de descanso nocturno.
• Cuidado en las relaciones sexuales: Las relaciones íntimas representan un factor de riesgo significativo para la cistitis. Como medida preventiva general, se aconseja orinar después del acto sexual.
• Selección de prendas transpirables: A menudo, el uso de ropa ajustada y confeccionada con materiales sintéticos se relaciona con la cistitis recurrente. Se sugiere optar por prendas altamente transpirables.
• Consumo adecuado de agua: Mantener una ingesta suficiente de agua asegura una producción óptima de orina y contribuye a la eliminación de gérmenes.
• Moderación en el consumo de alcohol y café: Los profesionales médicos sugieren limitar el consumo de bebidas alcohólicas y café, ya que estos pueden irritar la vejiga y empeorar los síntomas característicos de la cistitis, como la picazón y el ardor en la región genital.
• Ingesta de alimentos ricos en fibra: Incorporar frutas, verduras y productos integrales con alto contenido de fibra ayuda a regular el tránsito intestinal y, contribuye a prevenir el estreñimiento, que puede dificultar la expulsión de bacterias.

La cistitis es un problema común de salud pélvica, especialmente durante los meses de verano. Reconocer los síntomas, seguir prácticas de prevención y buscar tratamiento a tiempo permiten disfrutar de un verano sin molestias ni inquietudes relacionadas con la salud urinaria. Recuerda que cuidar la salud pélvica es esencial en todas las estaciones del año.

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