Se trata de una de las incontinencias más difíciles de resolver
“Expresiones del tipo ‘es para mearse de risa’ o ‘¡qué divertido!, me meo’ son muy habituales, pero representan un problema muy común entre la población especialmente femenina., hasta el punto que se han escrito incluso libros hablando de anécdotas y soluciones somo el de la Fisioterapeuta Urcelay en 2016. Y es que, a partir de una determinada edad o tras pasar por uno o varios embarazos, nuestro suelo pélvico ya no responde como debe ante este tipo de estímulos no quedando otro remedio que llevar en el bolso compresas o salva slip si no queremos que nuestra falda o pantalones sufran las consecuencias.
¿Podemos prevenir los escapes involuntarios de orina?
No todas las incontinencias de orina se pueden prevenir exclusivamente con fisioterapia, pero sí muchas de ellas. Mantener un buen tono en los músculos del suelo pélvico es fundamental de cara a evitar las incontinencias de esfuerzo. Y llevar unos buenos hábitos higiénico-dietéticos en cuanto a ingesta de líquidos, frecuencia miccional, etc. ayuda a prevenir las incontinencias de urgencia.
“Pero hay incontinencias que no tienen que ver con la fuerza del suelo pélvico, ni con unos buenos hábitos, matiza la Doctora Muguerza de la Unidad de Salud Pélvica Muguerza-Franco. Pueden deberse a una mala angulación entre el cuerpo de la vejiga y la uretra, o con una lesión de origen neurológico, con un prolapso que requiera incluso tratamiento quirúrgico”
La incontinencia que se produce ante un ataque de risa es, en su opinión, “de las más difíciles de resolver, porque se produce más por una falta de control central que por un problema mecánico o de falta de fuerza.”
Malas costumbre de la infancia
Aguantarse’ las ganas de orinar cuando somos pequeños puede pasar factura años después: Los malos hábitos que se generan en la infancia pueden llevar a alterar el ritmo miccional y defecatorio de los futuros adultos.
“Niños, y sobre todo niñas, que aguantan la orina y las heces hasta llegar a casa son candidatos a sufrir problemas como estreñimiento, prosigue la doctora Muguerza, incluso se dan casos quienes llegan a casa ‘a punto de reventar” porque se les ha inculcado la idea de que no es sano ir a baños en sitios públicos, incluso en el colegio o porque estos carecen de papel higiénico”
“En el tiempo que llevamos tratando este tema en nuestra Unidad de Salud Pélvica, hemos escuchado a muchos pacientes decir que dejan de viajar, de salir con amigos, de practicar deporte o de mantener relaciones sexuales por problemas de incontinencia. Incluso hay quien ha preguntado que deben hacer para no reírse. Y eso es muy pero que muy triste.
Estimulación y Silla Ensella
Es importante fortalecer el músculo pélvico mediante ejercicios como los de Kegel, pero también es contraproducente cortar la micción cuando no se pueden contener las ganas de orinar. Y ya no digamos si disfrutando de un momento divertido vamos a tener que pasar al drama por un tema de fugas. La fisioterapia en pelvi-perineología abarca mucho más que el tratamiento muscular y la reeducación miccional, hay que aprender a usar la fuerza adquirida
Si has probado muchos tratamientos, pero no termina de mejorar tu problema, solicita ya una cita en la Unidad Pélvica Euskalduna y prueba con su tratamiento estrella la Silla Ensella que nos permite recibir cientos de estimulaciones por minuto sin necesidad siquiera de quitarnos la ropa.
Media hora de Ensella equivale a muchas de ejercicios y frustración así que no dejes que la perdida de orina te amargue la vida y disfrútala con la mejor de tus sonrisas. Llámanos.
FUENTES: Famacosalud, Muguerza-Franco – GCI